Boca jugó bien y venció por 2-0 a Tigre en La Bombonera. La gente se acordó todo el tiempo del máximo rival, al que enfrentará en la Sudamericana. Doblete de Emmanuel Gigliotti para ganar confianza. “Queremos la Copa…” El arranque fue parejo. Sebastián Rincón tuvo el primer mano a mano del partido y su disparo se fue muy cerca. La más clara la tuvo Emmanuel Gigliotti
: Marcelo Meli lo dejó solo y el cabezazo del delantero fue  desviado por Javier García. El Xeneize dominó pero le costó en la última jugada: llegó con facilidad a tres cuartos de cancha. Meli se hizo dueño del mediocampo y pudo controlar el juego. Sin embargo, a la hora de la definición, sólo cayeron centros desde ambas bandas. En el complemento, Roldolfo 
Arruabarrena metió un doble cambio ofensivo: mandó a la cancha a Andrés Chávez y Leonardo Suárez (debut en la Primera de Boca), en lugar de José Pedro Fuenzalida y Federico Carrizo
, respectivamente.  A los 26 minutos se rompió el cero: Andrés Chávez fue derribado en el área y Germán Delfino cobró penal. Emmanuel Gigliotti fue el encargado de ejecutarlo y lo falló, pero en el rebote que dio García estuvo atento y la empujó para abrir el marcador y poner en ventaja al local. El gol le dio la tranquilidad necesaria al equipo. Chávez entró en gran nivel y generó el desequilibrio que el partido requería. En uno de esos avances, tiró un centro atrás que el “Puma” capturó tras un rebote, para sellar su doblete a los 39 minutos.
Boca jugó bien y fue el justo ganador. La gente se la pasó cantando contra River, pensando más en la semifinal de la Copa Sudamericana que en el torneo. No está mal. Sin embargo, el equipo del “Vasco” no deja tirado el campeonato. Habrá un escollo más (Arsenal) ante del Superclásico. Pero la gente quiere eliminar al máximo rival.]]>