Battaglia admitió hoy que falta para su regreso tras ser operado del tobillo. El volante fue víctima de varias y complicadas lesiones en el último tiempo.

Se lo extraña. Todos los hinchas quieren volver a ver cómo pelea cada pelota como si fuera la última, cómo deja todo por la camiseta. Pero Sebastián Battaglia no está pasando un momento sencillo de su carrera, acosado por una mala racha de lesiones que lo tienen a maltarer hace algo más de un año y medio.

Todo marchaba sobre ruedas, pero el 1 de noviembre de 2009 en Rosario, Boca no solo perdió un partido de fútbol por 2-1, sino a uno de sus futbolistas más ganadores junto a Guillermo Barros Schelotto. Una osteocondritis en su rodilla izquierda por la que comenzó un tratamiento intentando evitar el quirófano lo relegó del resto de aquel Apertura. Sin embargo no quedaron más alternativas y fue operado el 7 de enero de 2010, luego de que los esfuerzos por no llegar a ese punto fracasaran.

No hubo Clausura el año pasado para Battaglia y tampoco amistosos previos al Apertura. Recién volvió en el arranque del certamen doméstico ante Godoy Cruz en agosto de 2010. Y otra vez todo iba bien, jugó 14 partidos a lo largo del segundo semestre, pero el 4 de diciembre pasado previo a recibir a Quilmes, al León le volvió a jugar una mala pasada su rodilla izquierda, la misma que le impidió estar presente en el Torneo de Verano.

Sin haber tenido ritmo futbolístico durante la pretemporada regresó frente al Tomba en la primera jornada del Clausura y estuvo presente en cinco encuentros. La última vez que jugó fue en el duelo contra Olimpo, el 20 de marzo. En un entrenamiento posterior a dicho encuentro sufrió una tendinitis aquiliana.

Más tarde, a mediados de abril y cuando estaba volviendo a trabajar en el campo, una nueva lesión lo aquejó en uno de sus tobillos. Tuvo que ser intervenido quirúrgicamente otra vez y debió quedarse en Buenos Aires a continuar con su reahabilitación mientras el resto del plantel se ponía a punto en Brasil.

En diálogo con Radio Mitre esta mañana, Battaglia aseguró que todavía no piensa en la vuelta y debe estar tranquilo para terminar con la molestia. Señal de que el León sigue herido, señal de que tendremos que seguir esperando para verlo otra vez en la cancha.