Luego de la victoria ante Talleres, el colombiano justificó su elección en la jugada que pudo desembocar en el tercer gol. Mirá.


En la última fecha de la Superliga, Boca se quedó con tres puntos vitales tras vencer a Talleres en Córdoba y le permiten seguir firmes en la pelea por el campeonato a falta de cinco fechas para su final.

Los goles de Sebastián Villa y Carlos Tevez fueron fundamentales para el desarrollo del partido y justamente, estos dos futbolistas fueron protagonistas en una jugada que pudo desembocar en el tercer gol azul y oro.

Cuando el resultado estaba 2-0 y parecía inamovible, el ex Deportes Tolima fabricó un contraataque a pura velocidad antes de llegar a los 40 minutos del complemento. En los metros finales se encontraba acompañado por el Apache y a pesar de ello, el jugador cafetero se inclinó por la personal, remató al arco y Guido Herrera impidió que la ventaja sea aún mayor.

Una vez finalizada la jugada, los gestos del ex Juventus fueron claros y mostró cierto descontento por la chance desperdiciada. Luego de haber finalizado el encuentro, Carlitos expresó: “En la de Villa estaba para empujarla. Tiene otra velocidad. Donde aprenda a levantar la cabeza en los últimos metros, va a ser un jugador que hoy no hay en el plantel”.

En declaraciones con Súperfútbol, Villa habló sobre esta jugada en particular que pudo liquidar el encuentro ante la “T” y justificó su elección al momento de definir la jugada:

Cuando voy conduciendo, alzo la cabeza y me tomo un tiempo para darle el pase, veo que el central corre hacia él y yo me la juego individualmente. Como no concreté bien la jugada, se ve que no quise tocarla, pero si hubiera concretado sería diferente y se estaría hablando de otra cosa. Tomé la decisión porque me tuve confianza. Si en otro partido tengo la posibilidad de tocarla, lo voy a hacer porque también doy asistencias, trataré de no cometer los mismos errores y resolver mejor las jugadas”.

Además, resaltó el apoyo que le dio Tevez no solo a él, sino a todos sus compañeros:

“Carlos no es un jugador que grite mucho y me apoya a mí y a los otros jóvenes. Siempre contamos con la experiencia de él. Quise terminar yo la jugada, en la vida hay que tomar decisiones, a veces acertamos y otras no, soy un ser humano y me puedo equivocar”.