El Xeneize partió ayer pero llegará hoy a Ibagué por las complicaciones climáticas. Enterate los detalles.


El plantel de Gustavo Alfaro ya se encuentra en tierras cafeteras pero todavía no llegó al lugar de destino. Lo que sería un viaje a Ibagué, con escala en Cali, terminó siendo una gran travesía (todavía) sin final.

A las 14 hs del lunes, Boca partió rumbo a Colombia en un chárter desde Buenos Aires y aterrizó a las 21.45 en la ciudad de Cali. Hasta allí, todo era normal y el equipo se fotografió con algunos hinchas que esperaban por ellos.


Minutos después, la delegación abordó su segundo avión para llegar a Ibagué, donde jugará el cuarto partido de la fase de grupos ante Deportes Tolima. Pero… pasaron cosas.


Debido a las malas condiciones climáticas que golpearon a la ciudad durante todo el día, mientras el plantel volaba hacia allí, cerraron el aeropuerto. Por eso, desde el aire, cambiaron los planes y el destino: finalmente, descendieron en Bogotá.

Mientras esperan por novedades, se entrenan en el predio de la federación colombiana de fútbol y luego, por la tarde, partirán hacia la casa de Deportes Tolima para cerrar un viaje interminable. Resta esperar que el tiempo ayude.

Si esto no ocurre, deberán ir en micro en un trayecto que durará cuatro horas. Por reglamento de Conmebol, esta noche, el equipo deberá dormir en Ibagué sí o sí (24 horas antes del encuentro). ¿Qué pasará?