Boca cayó ante River por 2 a 0 en el primer clásico del verano. Arrancó bien, pero se fue quedando. El rival fue superior y mereció la victoria.

El encuentro comenzó con Boca con más tenencia de pelota, más adelantado. El equipo de Bianchi salió más decidido a buscar desde el arranque.

Lautaro Acosta, muy enchufado y buscado por sus compañeros, parecía ser la clave del ataque Xeneize, con desbordes por la banda derecha. Presionando mucho por el costado derecho, a Adalberto roman, el conjunto azul y oro avanzaba pero, a la vez, se cuidaba de los contragolpes de River.

La primera jugada de gol del partido la tuvo Silva a los 25 minutos, tras un gran pase de Paredes: atajó Barovero y en el rebote no pudo Erviti. La respuesta de los “Millonarios” fue 10 minutos después, cuando Vangioni habilito a un Funes Mori que la tiró afuera. Entre esas pocas acciones se fue la primera parte.

El complemento vio a un Boca algo quedado. River salió con más decisión y tuvo un gran ocasión en los pies de Rodrigo Mora. La pelota se fue lejos, pero el Xeneize seguía descuidado en la línea defensiva. Y minutos más tarde lo pagó: a los 28, tras un centro de Vangioni, Mora cabeceó solo en el punto del penal y marcó el primer gol del encuentro.

Incluso después pudo haberse estirado la ventaja: luego de un palo tras un remate de Mora, Funes Mori volvió a impactar el poste en el rebote. Bianchi veía que su equipo perdía en el mediocampo y metió a Ribair Rodríguez en lugar de Pablo Ledesma. Y fue el debutante quien representó la respuesta de Boca, con un remate desde media distancia que se fue lejos.

El Xeneize parecía no encontrar la forma de empatar el resultado. A los 35 ingresó Lucas Viatri por un Leandro Paredes que tuvo poca participación.

Y, para peor, River estaba cada vez mejor: presionando, Rojas le quitó la pelota a Ribair y asistió a Mora, quien, nuevamente, marcó y puso el segundo. La historia ya estaba escrita.

Fue derrota en el José María Minella. Un Boca que arrancó bien pero que fue perdiendo la pelota y la actitud con el correr de los minutos. Hay tiempo y deberá usarse para mejorar.