En el debut en el Torneo Inicial, Boca cayó como visitante 3 a 0 ante Quilmes. El equipo fue desprolijo en defensa y deslucido en ataque. Un primer tiempo para el olvido. Boca no se encontró en ningún momento. Para colmo, casi desde el arranque estuvo abajo en el marcador: a los 11 minutos, Martín Cauteruccio capturó un rebote luego de un rechazo fallido de Matías Caruzzo y remató cruzado al segundo palo de Ustari, que nada pudo hacer. Quilmes se ponía en ventaja siendo superior. Para colmo, las malas noticias no dejaban de llegar. A los 18 minutos fue expulsado Santiago Silva. El delantero uruguayo reaccionó con una patada ante una falta recibida por Sebastián Romero. Vio la tarjeta roja en el peor momento del Xeneize en el encuentro. La reacción al gol parecía no llegar. El conjunto azul y oro trasladó la pelota cuando la tuvo, pero careció de ideas que logren jugadas de gol. Así se fue la primera parte. El complemento fue muy parecido. Falcioni intentó darle un enfoque más ofensivo al equipo con el ingreso de Orlando Gaona Lugo en lugar de Ledesma. Pero inmediatamente después llegó el segundo golpe: Pablo Garnier, tras una gran jugada colectiva, convirtió un golazo para estirar la ventaja del “Cervero” en el encuentro. El ingreso de Cristian Álvarez por Chávez significó un cambio en el equipo visitante. De la mano de “Jopito” y Gaona, Boca pareció acercarse más al descuento. Pero no pudo, y fue su rival el que marcó y liquidó la historia: otra vez Cauteruccio estuvo para convertir el tercero, tras un rebote que dio Ustari. Dolorosa derrota Xeneize en el arranque de este torneo. Y ahora se viene otro gran desafío: el miércoles, la final de la Copa Argentina, ante Racing. A mejorar.]]>