Russo y una charla sobre su vida. La palabra del entrenador de Boca.


Uno de los grandes artífices para la obtención del torneo local es sin dudas Miguel Ángel Russo. Tras levantado la Copa Libertadores en el 2007 en lo que fue su primer etapa en el club, el entrenador tiene un nuevo logro en el Xeneize y ahora, aspira a seguir por esta senda.

La gran seguidilla de resultados que se dieron en el tramo final de la Superliga, permitieron que el club de la Ribera supere a su clásico rival en la última fecha y se quede con un nuevo título.

Además de las conquistas en el mundo futbolero, el estratega azul y oro ha mostrado en más de una ocasión su lado más humano. En una entrevista con Super Deportivo Radio recordó su pasado y confesó:

“Siempre tuve gente alrededor mío que me ayudó en todos los niveles. Como papá pretendo que mis hijos me recuerden, me valoren como ser humano. Pienso en que mis hijos sean mejores que yo. Mi padre es algo inconcluso dentro de mi vida porque no lo tuve. Pero la vida me dio muchísimas otras situaciones que, no digo que lo reemplazaron, pero tuve gente que me protegió y cuidó de una u otra forma y eso para mí es invalorable”.

Continuando con este tema particular, Russo prosiguió:

“Siempre te queda la pregunta de qué hubiera querido de mí. Dios me quitó algo tan importante como crecer sin un padre pero tuve muchos sostenes como familia y amigos en forma incondicional y todo lo que es el aprendizaje duro de la vida, de eso tampoco reniego. El hijo siempre se pregunta ‘¿estará contento con lo que hice en mi vida?’. Dios sabrá por qué todo, ¿no?”