El volante manifestó en conferencia que el plantel quiere los tres títulos. Y mandó un mensaje a los críticos: “Detrás de la suerte hay un gran trabajo”. Tras estar varias semanas alejado de las canchas, Pablo Ledesma regresa. Ya dejó atrás el esguince de grado II sufrido y solo piensa en el encuentro ante Banfield, en el que será titular. Hoy, brindó una conferencia de prensa luego del entrenamiento y habló sobre la recuperación.

Pasé un mes difícil y complicado. No es lindo ver todos estos partidos desde afuera. Gracias a Dios la lesión quedó atrás. Fue un error haber ido a buscar la pelota así.”. “Trabajamos en doble turno. Se hizo un trabajo bárbaro, estoy disfrutando de volver a sentirme jugador”.
Como todos los jugadores del plantel, el volante no deja ningún torneo de lado. Al igual que sus compañeros, Pablo quiere ganar todo lo que juega. Y cree que, si se llegó a esta instancia, es por el trabajo hecho.
“Sabemos que todavía quedan partidos. Vamos a tratar de darle una alegría a la gente. La prioridad es todo”. “Mis compañeros hicieron un esfuerzo bárbaro. Todos están muy metidos y comprometidos con esta causa. Sabemos que no muchos equipos llegan a las últimas instancias. Detrás de la suerte hay un gran trabajo”.
En cuanto a la Copa Libertadores, afirmó que es imprescindible no equivocarse. Y acerca del Clausura, opinó que dependen de sí mismos y eso es bueno.
En este tipo de instancias un error te puede dejar afuera de la Copa. Todos los rivales son difíciles. Vamos tener que estar atentos”. “El torneo local está muy parejo. Ningún equipo se saca demasiadas ventajas. Pensamos en hacer bien nuestro trabajo”.
Por último, no ahorró elogios para su compañero y capitán, Juan Román Riquelme, con quien tiene una gran relación. Hay buen clima en Boca.
Riquelme es una persona excepcional y es un jugador bárbaro. Estoy orgulloso de poder jugar junto a él. De Román no me sorprende más nada. Es un jugador fuera de discusión”.
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