Los más chicos, que dan sus primeros pasos en la Primera, destacaron el apoyo recibido puertas adentro. Esto dijeron.

“Son el futuro del club”, expresó Miguel Ángel Russo hace unos días y les dejó en claro a los más chicos que la banca está presente. Desde el primer día, el entrenador dijo que solía hacer debutar a juveniles de inferiores y por el momento, dentro de un año con muchas complicaciones y grandes resultados, viene cumpliendo su promesa.

Con su llegada sumaron minutos cuatro chicos que se venían mostrando hace tiempo en inferiores: Gastón Ávila, Exequiel Zeballos, Alan Varela y Luis Vázquez. Mientras que otros, también convocados, esperan su chance. Más allá de que el camino es largo y deberán surfear la vorágine que significa vestir la camiseta de Boca, los nombrados cumplieron con creces y poco a poco se hacen un lugar en el equipo.

Agustín Obando ya tiene 30 partidos junto al plantel profesional, tras su debut a principios del año pasado. Con Miguel se volvió casi una fija en el equipo alternativo o en los segundos tiempos y tuve hasta la oportunidad de convertir: “Me quedó ahí y por suerte la pude meter, nunca se me había dado. Es raro sin gente pero lo disfruté muchísimo”. Y a su vez remarcó la importancia del DT y el plantel: “Russo y el grupo te dan mucha confianza, es importante en un club como Boca, por eso todos los chicos disfrutamos mucho.

Volvé a ver el golazo de Agustín:

Quien también se sumó a los mismos dichos fue Gastón Ávila, llegado con Nicolás Burdisso desde Rosario Central y que se lució durante su primer año en el equipo de Schiavi: “Quiero disfrutar este momento. Es lindo jugar con compañeros que compartimos momentos de Reserva, el sueño era este”. Mientras que sobre Russo, agregó: “Miguel me da la confianza para que juegue tranquilo, que aprenda equivocándome. Nadie me va a decir nada y me apoyan de la mejor manera”.

Mientras que por la misma línea, Alan Varela también destacó el apoyo de todo el grupo de trabajo. “Los compañeros me dan toda la confianza, juego como en los entrenamientos. Son todos muy buenos jugadores y te la dejan redondita para que juegues”, sentenció el volante de 19 años. Lo cierto es que, a pesar de la pandemia, fue un gran año y el futuro del club está asegurado.