El arquero exBoca cargó contra el DT, luego de su salida del club. “Me mintió a mí y a Crespi”, afirmó. Al empezar la pretemporada, una de las ausencias fue Javier García. A pesar de ser jugador de Boca, el arquero no se presentó porque se le dieron dos días más de vacaciones. Su vínculo con Tigre no había sido renovado hasta ayer, por lo que pasó varios días en la incertidumbre de saber qué le deparaba el futuro. En el Xeneize no iba a tener lugar, por diferencias con Falcioni. Diferencias que se encargó de aclarar en una entrevista concedida al diario Olé:

“Me comí una espera que no merecía. Se me hicieron los días muy largos y sabía que en Boca no iba a seguir. Lo sabía desde el año pasado, porque el técnico tenía un problema personal conmigo. El técnico nos mintió a mí y a Crespi en una reunión. Le está mintiendo y haciendo mal al club, le está haciendo mucho daño”.
A García también parece haberle molestado el ninguneo del técnico, quien hace unos días afirmó que el equipo no tenía quien custodie los tres palos. Y le recrimina haber fallado a su palabra en junio de 2011:
“Que diga que Boca no tiene arquero cuando yo era jugador del club, porque con Tigre hasta ese momento no había arreglado… No se hizo cargo de las palabras que me dijo el año pasado, cuando me pidió que me fuera en busca de continuidad para después poder volver. Yo lo acepté y creo que me fue bien. Falcioni faltó a la palabra, porque jugué 37 partidos y tuve el segundo arco menos vencido”.
Con tristeza, el actual guardameta del conjunto de Victoria recuerda su paso por el Xeneize. Y afirma que su peor momento en el club fue con el “Emperador” al mando.
“Quiero que quede claro que con Boca no tengo nada, lo quiero un montón. La verdad es que no sé qué pensar, serán beneficios propios que quiere él”. “Con Borghi siempre atajaba y no tenía problemas, decían que alegraba al plantel y todo eso… Y en tres meses pasé a quedar afuera de todo”. “Con Falcioni a veces concentraba en una habitación solo. Con él pasé seis meses de mierda, me hizo la vida imposible. Quiero que se sepa la verdad, porque antes me tenía que callar la boca porque era un pendejo. Ahora también me hizo pasar una semana de mierda, y todo por un capricho”.
A pesar de continuar en Tigre, a García le queda la espina de no tener una chance en el Xeneize. Y asegura que mucha gente del fútbol opina igual que él sobre Falcioni.
“Yo quería entrenarme, por lo menos. Pero no estoy en contra de Boca y si no hablé antes fue por respeto al club y porque los dirigentes me lo pidieron. Y no me dejaban entrenar, que era lo que me correspondía porque tenía contrato. Por un capricho del técnico no podía hacerlo. Si no le gusta cómo atajo es una cosa, pero por un problema personal, no. Hasta el día de hoy no sé por qué carajo tiene ese problema conmigo, nunca me lo planteó”. “Estoy mal. Yo quería volver a ponerme el buzo de Boca. Por lo menos, ir a entrenarme y ver qué pasaba. Me deja tranquilo que mucha gente -jugadores, representantes, técnicos, personas ligadas al fútbol- me dijo que es mala persona. Y uno, cuando le dicen eso, piensa, y le tenés que dar la razón”.
Por último, respondió sobre la salida de Juan Román Riquelme del club, y la posibilidad de ser compañeros.
“Como jugador es una tristeza enorme su salida. Desprestigia muchísimo al fútbol argentino, pero como amigo quiero que sea feliz de una vez por todas. Tiene 34 años y se lo merece, porque parece que todo lo que hace nunca alcanza. Pasé mucho tiempo al lado de él y es feo y duele ver cómo lo tratan. Me pasó de estar concentrado con él y no poder creer las barbaridades que se decían. Yo le pregunté cómo hacía para aguantarlo. ‘Son cosas que pasan’, me respondió. Un día se iba a cansar”. “Yo sólo lo voy a llamar para ver cómo anda la familia. Mi relación con él ya pasa por otro lado y no lo tengo que convencer de nada. Muchas veces él no está y yo voy a la casa a tomar mates con la mamá o con el hermano. Lo quiero un montón y le estoy muy agradecido por todo”.
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