¿Perder una final o descender? “Quique” charló con Planeta Boca Juniors y no dudó. Todas sus declaraciones.


Así como recordamos jugadores que marcaron una huella por sus goles como Martín Palermo o por sus gambetas como Juan Román Riquelme, los hinchas también tienen en la memoria a aquellos que dejaron la vida en la cancha y se han caracterizado por su garra y entrega en el campo de juego.

Dentro de este último grupo selecto se pueden nombrar a Mauricio Serna, Blas Giunta, Enrique Hrabina, entre otros. Justamente, “Quique” tuvo una charla con Planeta Boca Juniors y allí habló sobre varios temas, todos referidos al Xeneize.

En el último torneo local, el club de la Ribera pudo dar la vuelta olímpica debido a la serie de resultados que se dieron y además le quitó el liderazgo a su clásico rival en la última fecha. Sobre aquel título, analizó:

Este campeonato se ganó ‘a lo Boca’ y el hincha extrañaba eso. Que tres jugadores vayan a una pelota, que estén encima de los árbitros, que metan. Estas cosas no hay que pasarlas por alto porque hacen a la finalidad de cumplir los objetivos. Boca estaba acostumbrado a ganar este tipo de campeonatos, en la última fecha, y eso es positivo”.

Agregado a la magnitud de la obtención de la Superliga, Hrabina entró en la comparación y eligió entre las dos opciones: perder una final o descender. El ex Atlanta no dudó y dijo:

“Boca puede un poquito más, siempre. Eso es ganar o jugar ‘a  lo Boca’. Estamos acostumbrados a esas gigantes epopeyas. Los que dicen que morimos, no saben nada. Perder una final no es irte al descenso, que es lo peor que te puede pasar“.

En su etapa como jugador Xeneize tuvo como entrenador al uruguayo Óscar Tabárez y sobre el Maestro soltó:

“Tabarez era maestro, sabía enseñar. No habíamos tenido nunca un DT con esas formas, con ese orden y con una manera diferente. Pudo llevar adelante todo lo que él pretendía. Fue uno de los mejores que tuve”.

“Quique” fue uno de los privilegiados que pisó el césped de La Bombonera y además de recordar aquellos tiempos, elogió al mítico estadio:

“La Bombonera esa la mejor cancha del mundo, no existe nada igual. Nunca sentí la misma sensación que se siente en la cancha de Boca. Te da energías, te sentís gigante cuando entrás a defender esos colores. Podés jugar bien, más o menos, pero siempre tenés que dejar todo”.

Por último, cerró:

“Me hice más fanático ahora que cuando jugaba. No me pierdo ningún partido, voy siempre a la cancha. Soy el hincha más loco que pueda existir, hasta yo me sorprendo, ja”.