El entrenador responde a las críticas. A su modo, defiende a sus dirigidos y su gestión al frente del plantel Xeneize. “Somos un equipo compacto”, sostiene.

Le pone el pecho a las balas. En una charla de fútbol con el diario Clarín, Julio César Falcioni sale a defenderse de las críticas. El DT de Boca cree que las opiniones negativas estuvieron siempre, aún cuando el equipo fue campeón, como en el Apertura del año pasado.

Boca fue cuestionado cuando sacó 12 puntos de ventaja y fue casi récord en todo. Es una opinión que respetamos. Nosotros intentamos siempre buscar lo mejor. En este juego uno trata de hacer y de no dejarle hacer al otro. Trata de buscar los mejores caminos para marcar las diferencias y que el rival no consiga eso”.

Sostiene el “Emperador” que no siempre se puede jugar mejor que el rival, pero que a veces sólo basta con convertir más goles, porque los encuentros son muy cerrados. Eso, según él, pasa con el equipo azul y oro.

“El fútbol competitivo hoy es así. Tenés que ser superior al adversario y marcar la diferencia. A veces podés marcarla en el juego y a veces en el resultado. A veces se da una cosa y no la otra. Lo importante es que el jugador se sienta seguro y firme. Y eso creo que pasa en Boca. Yo al equipo lo noto convencido”.

Sobre los bajos rendimientos de algunos jugadores, Julio va más allá. Opina que el sistema y el esquema del conjunto hace que eso no se note tanto y que cada futbolista aporta lo suyo.

“Boca es un equipo compacto. Siempre se basó en tener buenas individualidades que respalden el funcionamiento del equipo. Cuando esas individualidades no funcionan, a lo mejor lo que respalda es ese funcionamiento”.

Por último, sobre los cambios, reivindica su carácter conservador. Y aclara que para él hay más de once jugadores titulares en el plantel. Cita ejemplos:

Cuando el equipo se consolidó, yo siempre traté de sostenerlo. Y hoy para mí el equipo está consolidado. A Rivero lo considero titular, igual a Caruzzo, a Orion, a Sánchez Miño. A veces pueden estar en la cancha de entrada o ser alternativas. A veces los recambios son tan o más importantes que los titulares. Pasó con Blandi, con Chávez y con Mouche cuando salimos campeones”.