El entrenador Xeneize cree que el enganche es una pieza fundamental para lograr el torneo continental que Boca jugará el próximo semestre: “Es el distinto”, opina.

Nadie del mundo Boca deja de pensar en lo que se viene. Es que el haber conseguido el torneo Apertura logró que la ilusión de hinchas, jugadores, cuerpo técnico y dirigentes crezca, de cara a un semestre de muchos desafíos. Julio César Falcioni recuerda lo hecho en el campeonato local y hace un balance de este 2011 que termina con el Xeneize como equipo con mayor cantidad de puntos.

“Fuimos un equipo ordenado y organizado. En el fútbol de hoy no se pueden dejar espacios libres. Yo a los jugadores les doy libertad para atacar y ellos tienen que tener protagonismo para defender. Para mí Boca fue superior a todos. Fue el mejor. Consiguió más puntos y fue el más parejo. Hicimos lo necesario para ser el mejor del torneo”.

Pero también piensa en el 2012. Al igual que Erviti, Julio sabe que la Copa Libertadores es el primer objetivo a lograr, luego de cuatro años sin ganarla. El entrenador analiza el certamen continental y opina que no hay margen de error.

“La Libertadores es uno de los tantos objetivos que tenemos en el próximo semestre. Es muy difícil de jugar. Un día te levantás mal y te quedás afuera. Pero es el riesgo que se corre porque en la Copa están los mejores. Y Boca hacía rato que no estaba ahí disputando esos partidos importantes. Son partidos especiales porque no hay revancha y eso es lo peor que puede haber. Habrá que acostumbrarse a no fallar”.

La última Libertadores que ganó Boca fue en 2007, cuando Juan Román Riquelme fue figura indiscutida del equipo. Pasó el tiempo y el diez sigue siendo el máximo referente del grupo, y así lo reconoce Falcioni.

“Román es el líder, el capitán y deseamos que haga un buen trabajo en lo previo para hacer una buena Libertadores. Necesitamos que esté fuerte para ganar la Copa. Vamos a necesitar de él y de todos, que estemos todos concentrados porque se viene un año duro”.

Y continúan los elogios para Román. Ahora por su capacidad de ver el juego. En diálogo con el diario Clarín, el técnico admite las ventajas que generan tenerlo en el plantel Xeneize.

Riquelme es diferente a todos. Es el distinto. Ve y entiende muchísimo de fútbol. Por eso se puede hablar con él de juego o de táctica, es algo que aprendió con los años y que seguramente trajo con él desde siempre. Es un privilegio tenerlo. Y sus compañeros también lo destacan”.

Falcioni, como todos en el mundo Boca, ya piensa en lo que se viene. Y por eso, quiere tener al “distinto”.