Pura pasión.

Una historia para emocionarse. Mirá de qué se trata.

Esta historia comenzó hace algunos días, más precisamente el sábado 10 de noviembre. Aquella tarde gris y lluviosa produjo, entre otras cosas, que el Superclásico debiera postergarse debido a que la cancha no estaba en óptimas condiciones.

Pero lo más importante estuvo afuera. Ernesto, uno de los tantos enamorados de Boca, se hizo conocido por todos en apenas pocas horas: su foto yendo a La Bombonera en silla de ruedas se viralizó rápidamente y asombró a propios y extraños.

Pero las malas condiciones climáticas de aquella jornada rompieron la silla de este hincha, que cuando se encuentra con el club de sus amores no puede borrar la sonrisa de su cara. Por eso, el club junto a la ONG Cilsa y la Fundación Boca Social decidieron realizar otra gran movida solidaria: la entrega masiva de elementos ortopédicos.

Hoy, Ernesto y muchos fanáticos recibieron la donación y regresaron felices a sus respectivos hogares. Ahora esperarán por el 24 de noviembre, con la ilusión intacta de que el Xeneize les regale una alegría grande, bien grande. ¡Un gesto para aplaudir!