En esta nueva edición vamos a recordar, en el día de su cumpleaños, a un mediocampista central que dejó su apellido grabado en la historia grande del club.

Nació en Medellin, Colombia,  el 22 de Enero de 1968 y comenzó su carrera como futbolista profesional en el Deportivo Pereira de su país, después defendió los colores del Atlético Nacional. En 1998 Boca puso la mirada en aquel país y 8 años más tarde de su debut en las canchas, llegó a Argentina para firmar contrato con el Xeneize.

Rápidamente se metió a la gente en el bolsillo logrando ser uno de los jugadores más queridos. Jugar en Boca no es igual que jugar en otro club, pararte en el medio de La Bombonera y ver a la hinchada alentando sin parar te hace dar cuenta que necesitar ese “extra”, dejar la vida en cada jugada y el alma en cada partido. No fueron muchos los que se calzaron la azul y oro y la defendieron como él.

Logró el Torneo Apertura 1998, Clausura 1999 y Apertura 1999 a nivel local, también levantó la Copa Libertadores 2000, 2001 y la Intercontinental 2000 ganándole 2-1 al Real Madrid en Japón haciendo delirar de alegría a las 10.000 personas que acompañaron a Boca en aquel partido y a la mitad más uno en la mañana de la Argentina.

Entendió muy bien el “Mundo Boca” y supo sobrellevarlo, fue un león en la mitad del campo y formó parte de uno de los mejores Boca de la historia. Pudo hacer, a base esfuerzo, que su apellido quede grabado como uno de los ídolos del club.

Hoy “Chicho” Serna en la Boca es sínonimo de todo eso que el hincha espera de un jugador… garra, entrega y amor por la camiseta.

Feliz cumpleaños para Mauricio “Chicho” Serna.