Jorge Ameal se reunió con el representante de Riquelme y le ofreció contrato hasta fines de 2011, cuando vence su mandato presidencial.

El deseo del enganche es renovar por tres años con la institución Xeneize, por lo que la negociación estaría recién dando sus primeros pasos. Habrá qué ver a qué tipo de acuerdo llegan, ya que la diferencia de extensión del vínculo entre ambas partes es de 1 año y medio.

“Debería ser mi número 10 porque es fundamental, me resuelve todo”, exclamó Borghi hace unos días, dejando más que claro que desea que Riquelme continúe en Boca.

Luego del encuentro de hoy, quedaron en volver a reunirse el próximo sábado, así como también la semana próxima para no demorar más la situación de Román. Por lo menos, predisposición es lo que sobra.

Por parte de la dirigencia de Boca son optimistas y creen que esto va a llegar a buen puerto. En el riñón del jugador, procuran ser más cautelosos.

Esperemos que esta novela, que está en el primer capítulo, tenga final feliz.