El jugador del equipo de futsal,  que le ganó a River el fin de semana, remarcó que el objetivo es tener una buena participación en la Copa Libertadores que se viene.

Andrés Santos atraviesa, junto a todo el equipo de futsal de Boca Juniors, el mejor momento desde que llegó al club, allá por 2007 y con solo 18 años. El fin de semana pasado le ganaron agónicamente a River 4 a 3 un encuentro que parecía perdido y lideran con puntaje perfecto el Torneo Clausura. Acumulan 27 puntos en nueve partidos, una unidad más América del Sud, su escolta, e incluso con un encuentro menos.

El conjunto Xeneize estiró a once la racha sin perder ante el clásico rival. Santos, autor de uno de los goles, dialogó con Planeta Boca Juniors Radio, por Radio Cooperativa (AM 1300), dio su punto de vista sobre por qué dieron vuelta el cotejo:

“Boca lo ganó porque tenemos un laburo de muchos años, venimos forjando una forma de jugar. Cuando el equipo andaba mal individualmente el trabajo en la semana pudo solucionar las cosas”.

“Los primeros dos clásicos desde que llegué los perdimos, pero por suerte no volvimos a perder”.

Cuando el jugador arribó a la entidad de la Ribera, el futsal argentino era dominado por Pinocho. Boca logró romper esa hegemonía:

“Cuando Pinocho dominaba era un proceso, nosotros teníamos un equipo con muchos pibes y ellos ganaban con los grandes, manejando los tiempos. Yo sabía que a la larga íbamos a formar un equipo como éste y lo estamos demostrando”.

Entre el 7 y el 13 de diciembre en Canelones, Uruguay, el conjunto dirigido por Cristian Meloni disputará la Copa Libertadores 2013 de Futsal, con el antecedente de haber logrado el cuarto puesto en la edición 2011. El objetivo es claro, demostrar en el plano internacional los logros a nivel local:

“La mejora se va a ver si lo que hacemos a nivel nacional al plano internacional. Ahora en la Libertadores vamos a ver cómo estamos en ese plano, queremos dar el salto de pelear cosas internacionalmente”.

Existe una gran diferencia sobre todo con los equipos de Brasil. Según Santos, esto se da porque en Argentina el futsal no es completamente profesional:

“La gran diferencia con los brasileños es el profesionalismo con el que trabajan ellos. Acá la mayoría laburamos y entrenamos a la noche, no podemos dedicarnos por completo al futsal. Ellos sí y hasta a veces entrenan más de una vez por día. Pero con jugadores que vienen de afuera de a poco se está emparejando un poco”.