El entrenador habló tras el partido en Quito y destacó la importancia de la victoria. Mirá lo que dijo.


Boca consiguió un 3-0 a favor en la altura ante Liga que lo posiciona muy bien de cara a la vuelta en La Bombonera. Y si bien no está nada definido, la ilusión de jugar una nueva semifinal está a flor de piel.

Tras el triunfo, varios protagonistas tomaron la palabra. Uno de ellos, como es costumbre, fue Gustavo Alfaro. Y en Ecuador, el entrenador se encargó de felicitar y destacar el trabajo del plantel en una cancha complicada. Además, se mostró molesto y dolido por las críticas que recibió durante la semana.

A la hora de analizar la victoria, volvió a centrarse en la identidad. Por eso, contó:

“En mi primera conferencia dije que quería recuperar la mística histórica de lo que es Boca. Este club siempre estuvo emparentado a ese tipo de fragor popular, la intensidad, la hombría, de equipo que se planta. Y eso no se consigue de un día para el otro, es todo un aprendizaje. Eso es madurez también, es ir en búsqueda de ella. A veces hay que empezar a derribar determinados tabúes, los argentinos estamos tan encerrados en definir cuál es nuestro estilo futbolístico que a veces terminamos tan enredados en nuestros dilemas y no sabemos lo que queremos. Si uno se prende, en este tipo de discusiones, termina desvirtuándose y perdiendo su norte, su esencia. Sabía que esto requería su tiempo, es lo que traté de ganar en el primer semestre. Pateaba la pelota para adelante mientras trataba de ir sembrando una identidad, que sea adquirida con el tiempo. Allí hubo tiempo de necesidad de conocimiento mutuo, de pruebas, de ensayos, de situaciones. Después estuvo un mercado en el medio donde buscamos perfiles y eso nos permitió empezar a tener otra identidad de equipo, más emparentada a lo que uno quiere y a lo que yo creo que es Boca”.

Para cerrar, se refirió al trabajo que realiza puertas adentro y a la importancia del 3-0, más allá del resultado:

“Quería recuperar esos valores porque sé que esos son los valores intrínsecos y necesarios para pelear una Libertadores. No la vas a ganar con estética, obviamente necesitás el talento pero la Copa la ganás con hombría, con inteligencia, solidaridad, generosidad y hambre. Les dije a los muchachos ‘si no perdemos la agresividad y la determinación, como en Paranaense, Boca es Boca y es respetado en todos lados, y tiene talento y sabe marcar la diferencia’. Lo asumimos para adentro, lo decimos con humildad, por una referencia de importancia histórica a la cual nosotros estamos obligados a responder. Tenemos que estar a la altura de las circunstancias. En eso, tenía que haber un cambio. Era clave. Si no existía ese cambio, este proceso tenía fecha de vencimiento. En la medida en que sigamos dando respuestas, creo que Boca ganó algo más que un partido, ganó en un montón de lugares. Hacia la vivencia interna, creo que ganamos más que eso“.

¿Están de acuerdo?

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